martes, 29 de marzo de 2011

Inseguridad

Es de noche, camino por una calle de Buenos Aires, con la sola idea de conseguir un regalo muy particular para una personita que adoro, de pronto unos brazos me rodean y una voz masculina me susurra al oido TRANQUILA, NO TE VA A PASAR NADA...... y sin mas mi reacción, impensada, visceral, primitiva.....mi brazo derecho aplica un golpe en las costillas del agresor y un movimiento rápido me permite tomar distancia, todo esto acompañado de un grito que sale de mi garganta ....NO, dos simples letras que juntas significaban NO VOY A PERMITIR QUE ME HAGAS DAÑO, NO VOY A PERMITIR QUE ME LASTIMES, simplemente NO.
Luego en casa, trataba de entender por que mi reacción no había sido la que aconsejo continuamente a mi hija por ejemplo, no te resistas, entrega todo lo que te pidan, cuidate .... llegue a la conclusión que el instinto pudo mas que todo aquello que aprendimos y nos recomiendan.
Hoy tratando de escribir estas lineas sobre este hecho tan común en nuestra ciudad hoy, y que viví hace tan solo unos días, solo tenía una imagen en la cabeza la obra de Edvard Munch EL GRITO.


No hay comentarios:

Publicar un comentario